MENSAJE POR LOS 125 ANIVERSARIO DEL COLEGIO
“STA. TERESA DE JESÚS” GOYA – CORRIENTES

PROTAGONISTAS DE LA HISTORIA SEMBRADORES DE ESPERANZA

Muy Buenos días, buenas tardes o buenas noches dependiendo del lugar o momento en el que se sumen a nuestra celebración. Para los que estamos en la mañana, en verdad, siento que es una mañana muy especial 125 años de presencia de las Hermanas Carmelitas Misioneras Teresianas en esa sentida ciudad de Goya.
Con gozo me uno a todos, para dar gracias a Dios por tan hermosa Obra, en nuestra querida ciudad de Goya, lugar donde tuve la dicha de nacer, crecer y también egresar de esa querida Comunidad Educativa y digo comunidad porque ese colegio, con tan significativo nombre, Santa Teresa de Jesús, celebra hoy la continuidad de sus 125 años de vida, de servicio, de compromiso, de respuesta a las urgencias de la Iglesia en el ámbito de la educación.
Al cerrar el año de festejos, celebramos con memoria agradecida, la trayectoria de hermanas y laicos, que en fidelidad a la misión confiada dan respuesta cotidianamente a los desafíos del mundo de hoy, teniendo presente la grandeza de la historia recibida, el presente complejo y colmado de desafíos; desafíos que alientan el futuro con renovada esperanza, para hacer frente a la misión educativa, teniendo siempre como centro la persona en toda su integridad.
Es oportuno dar gracias a tantas hermanas y laicos que dejaron y dejan , aquí su impronta y sus huellas, muchos se encuentran presentes en ese lugar, cuna de la llegada a América de las primeras hermanas, Carmelitas Misioneras Teresianas, quienes supieron abrir caminos para hacer germinar y crecer el sueño del Padre Francisco Palau: embellecer a la Iglesia, como también de transmitir y compartir la misión que abre a las nuevas generaciones la posibilidad de seguir anunciando el Evangelio que restaura y embellece la vida para seguir siendo “Protagonista de la historia y sembradores de esperanza” con el mismo espíritu y talante de Santa Teresa de Jesús, quien con coraje y valentía supo ser respuesta para su tiempo, hoy también que Ella nos siga inspirando, fortaleciendo para hacer realidad nuestra misión de evangelizar a través de la educación.
Gracias a todos por el compromiso, gracias por continuar construyendo puentes entre Dios y los hermanos. Gracias a aquellas audaces Hermanas que en el año 1897 cruzaron el océano llenas de alegría, sueños y proyectos que hoy desde el cielo nos acompañan, gracias también queridas las familias, alumnos, ex alumnos, amigos, Hermanas, goyanos en general.

Que el Dios de Santa Teresa y el Padre Palau sigan conduciendo la historia de nuestra presencia en ese querido lugar. Mis felicitaciones y bendiciones y que juntos podamos decir, “Quien a Dios tiene, nada le falta, ¡sólo Dios basta!

H. María Isabel Obregón cmt