Somos parte de un eslabón de la historia, de la Iglesia de la congregación y de la provincia, que buscamos dar respuesta, desde la comunión, la cercanía, la sencillez, la honestidad y el compromiso en bien de la Iglesia, a la que queremos: embellecer, escuchar, restaurar y anunciar
Hoy estamos celebrando el caminar de dos años, como Provincia Virgen de Guadalupe, en América. Si nos remitimos a lo que significa cumplir dos años, biológicamente, decimos, ya camina o de lo contrario algo le pasa, no tiene seguridad, no se pone de pie, no da el primer paso y buscamos entender las causas
Hoy nosotros podemos decir que estamos intentando caminar, tanteando el terreno, conociendo, porque la casa es grande tiene muchos espacios, conocidos y por conocer, lugares planos, y sinuosos, otros lugares con obstáculos. A medida que vamos creciendo intentamos identificar grietas, piedras, lugares seguros, para no tropezar, caer, provocar o abrir heridas.
Esta simbología nos ayuda a graficar nuestro crecimiento, porque estamos reconociendo nuestro gran cuerpo provincial, que tiene personas con mucha vida, dones, riquezas interculturales, internacionales e inter generacionales, en las diversas presencias con distintas realidades que nos invitan a ser Iglesia en salida, llena de esperanza, con alegría, asumiendo desafíos, como también crisis, que genera lo nuevo, lo diverso, el abrirnos al cambio, a dejar de lado él siempre se ha hecho así
Hacer memoria es de corazón agradecido, es mirar con espíritu de fe el camino transitado y con mirada esperanzada el presente – futuro, que el Señor nos regala. Hoy marcado con toda la realidad que vivimos como humanidad a causa de la pandemia y de tantas situaciones de pobreza, exclusión y necesidades que viven nuestra gente, nuestro pueblo y que nos desafía a ser creativos, solidarios, proactivos con lo que somos y tenemos
Como María en la visitación también requiere de nosotros actitudes de prontitud, gratuidad, generosidad, cuidado, paciencia, generatividad con nuestros tiempos espacios y recursos.
Gracias a Dios, esto experimentamos en todos los espacios, donde estamos presente, porque la vida así nos exige y nuestro amor a la Iglesia nos hace salir al encuentro, desde la escucha y la respuesta, especialmente con los pobres con los más vulnerables, como también en todo lo que hace a nuestra vida a través de las comunidades, equipos y presencias pastorales
Hoy es momento de volver a elegirnos como hermanas, hermanos, elección que significa fe en Dios, en nosotros mismos, en los demás, en las posibilidades que se tornan oportunidad de crecimiento humano – espiritual, en todos los ambientes que nos movemos, poniendo todo de nuestra parte, para hacer de la comunión un estilo de vida, a través de diálogos, encuentros, trabajos, buscando que nuestros vínculos sean renovados que genera esperanza y alegría de pertenecer y de pertenecernos como familia Palautiana.
Estamos llamadas a seguir haciendo camino de consolidación – apertura y compromiso serio, con todo lo que nos enriquece y hace fiel a la misión, porque nuestra vida es misión
Miremos a la Virgen de Guadalupe, ella nuestra patrona, que sabe salir al encuentro, camina con su pueblo y nos hace ser Iglesia en salida.
Festejemos, como nuestros pueblos, no perdamos la capacidad de celebrar y compartir, porque la alegría crece y la tristeza se achica cuando hay fiesta. El vino nuevo está llegando.
Gracias a todos por hacer posible la fiesta.
Feliz cumpleaños a todos los que somos parte de esta querida
Provincia, Virgen de Guadalupe
Maria Isabel Obregón, Animadora Provincial