10250186_10152104287580748_846181141352287427_n¡Pongámonos en camino!» «Releer todo a partir de la cruz y de la victoria». «Un rayo de luz en la oscuridad». «Con esta chispa se enciende una alegría humilde, que no ofende el dolor y la desesperación, una alegría buena y serena». Alentó el Obispo de Roma en la Vigilia Pascual de la Noche Santa. Con el Evangelio de la resurrección de Jesucristo: «Jesús ha resucitado, como había dicho». Con las palabras del ángel y las de Jesús a las mujeres, que encuentran la tumba vacía, y las palabras del Señor Resucitado: «No teman; avisen a mis hermanos que vayan a Galilea, y allí me verán». «Galilea es el lugar de la primera llamada, donde todo empezó. Volver allí, volver al lugar de la primera llamada», señaló el Papa Francisco, alentando a «releer todo: la predicación, los milagros, la nueva comunidad, los entusiasmos y las defecciones, hasta la traición; releer todo a partir del final, que es un nuevo comienzo, de este acto supremo de amor».
Tras hacer hincapié en que «también para cada uno de nosotros hay una «Galilea» en el comienzo del camino con Jesús». Y en que «ir a Galilea» tiene un significado lindo, significa «redescubrir nuestro bautismo como fuente viva, sacar energías nuevas de la raíz de nuestra fe y de nuestra experiencia cristiana», el Papa dijo que «volver a Galilea significa sobre todo volver allí, a ese punto incandescente en que la gracia de Dios me tocó al comienzo del camino. Con esta chispa puedo encender el fuego para el hoy, para cada día, y llevar calor y luz a mis hermanos y hermanas».